10 señales de que eres buen candidato para el balón gástrico
Introducción
El balón gástrico es una opción no quirúrgica para perder peso que gana popularidad mundialmente. Ayuda a reducir el apetito, controlar porciones y fomentar cambios duraderos. Pero no es apto para todo el mundo. Saber si eres buen candidato es esencial antes de comprometerte. Este artículo presenta las 10 señales principales de que podrías beneficiarte del tratamiento. Si te identificas con varias, la consulta médica puede ser el siguiente paso.
Señales de que eres buen candidato para balón gástrico:
1. Tu IMC está entre 27 y 40
El índice de masa corporal (IMC) es clave para evaluar la idoneidad. Los candidatos suelen tener un IMC entre 27 y 40. Este rango indica sobrepeso o una obesidad moderada, sin llegar al punto de necesitar cirugía. Si estás dentro de este rango, el balón puede ayudarte a perder peso con seguridad.
2. Has intentado dieta y ejercicio sin éxito duradero
Muchas personas luchan con el peso a pesar de sus esfuerzos. Si los métodos tradicionales no han funcionado, no estás solo. El balón gástrico aporta apoyo adicional. Limita físicamente lo que puedes comer, reforzando hábitos saludables. Por ello, es ideal para quienes buscan una solución estructurada y con apoyo.
3. No estás listo para una cirugía bariátrica
Algunas personas no quieren someterse a cirugía, y es totalmente válido. Puede deberse a la edad, salud o decisión personal. El balón gástrico no requiere incisiones y es temporal. Por eso es perfecto si prefieres un enfoque no quirúrgico para perder peso.
4. Estás comprometido con cambiar tu estilo de vida a largo plazo
Aunque eficaz, el balón gástrico no es una solución rápida. Funciona mejor con apoyo nutricional y ejercicio. Si estás decidido a adquirir hábitos saludables duraderos, esta herramienta puede ayudarte a lograrlo. Además, aporta estructura y responsabilidad para seguir el camino correcto.
5. Buscas apoyo a corto plazo
El balón gástrico permanece en el estómago unos seis meses. Ayuda a romper hábitos alimentarios nocivos. Si necesitas apoyo temporal para resetear tu rutina o prepararte para un evento, es ideal. Muchos pacientes siguen perdiendo peso tras la retirada del balón.
6. No padeces enfermedades digestivas o gástricas
Tener un sistema digestivo sano es clave. Si no tienes úlceras, cirugías previas o problemas gástricos, podrías ser apto. El médico valorará tu historial para comprobar si tu estómago tolera el balón con seguridad.
7. No estás embarazada ni planeas estarlo pronto
El embarazo y el balón gástrico no son compatibles. El balón ejerce presión en el estómago, lo cual no es recomendable durante la gestación. Si no estás embarazada ni lo planeas durante el tratamiento, podrías ser buena candidata. Además, perder peso antes del embarazo mejora la salud materno-fetal.
8. Estás preparado emocionalmente
La actitud es importante. El balón funciona mejor si estás mentalmente preparado para el cambio. Si aceptas orientación, sigues el plan nutricional y tienes metas realistas, puede funcionarte. El apoyo de familiares, amigos o un coach también aumenta las probabilidades de éxito.
9. Tienes tiempo para citas médicas regulares
La experiencia será mejor si acudes a revisiones. Estas ayudan a controlar el progreso y recibir apoyo. Si puedes comprometerte a visitas mensuales, consejos dietéticos y seguimiento, tendrás más éxito. Además, tu equipo puede ajustar el plan según tu evolución.
10. Quieres una opción para perder peso poco invasiva
Algunas personas prefieren soluciones progresivas y poco agresivas. El balón gástrico ofrece eso. Sin hospitalización ni recuperación larga. Se coloca por endoscopia y se retira igual. Así, es perfecto si buscas una vía más suave hacia una vida más saludable.
Por qué estas señales son importantes
Ajustarte al perfil de buen candidato aumenta las posibilidades de éxito. Se trata de alinear tus necesidades y compromiso con un tratamiento que apoya el cambio sostenible. Si varias señales coinciden contigo, habla con un especialista. Una consulta te dará más claridad y marcará los próximos pasos.
Conclusión
En resumen, identificar si eres candidato para el balón gástrico es el primer paso hacia tus objetivos. Si cumples varios de los criterios, podrías beneficiarte de esta opción segura y sin cirugía. Es fundamental contar con un equipo cualificado y comprometerte al cambio. Con apoyo adecuado, el balón puede ser una herramienta clave en tu transformación.
Para más información o reservar una consulta, visita la página de Cirugía de la obesidad del ACIBADEM Beauty Center.