Introducción
Los pómulos determinan cómo se percibe un rostro. Enmarcan los ojos, definen el perfil y aportan armonía. A lo largo de la historia, los pómulos altos han sido admirados, mientras que los bajos se mencionan con menor frecuencia. Pero ¿qué significan realmente estos términos? ¿Implica uno mayor belleza que el otro? Este artículo explica las diferencias entre los pómulos altos y los pómulos bajos, desde la anatomía y la percepción cultural hasta las opciones estéticas que pueden mejorar ambos.
Pómulos Altos vs Pómulos Bajos: La Anatomía
El pómulo, también llamado hueso cigomático, se encuentra debajo del ojo. Su posición varía según la persona. Cuando el hueso está más cerca de la cuenca del ojo, se considera un “pómulo alto”. Si se encuentra más cerca de la parte media del rostro, se denomina “pómulo bajo”. Ninguno de los dos tipos es mejor o peor; ambos son variaciones naturales. Sin embargo, su posición influye notablemente en la estructura y el equilibrio facial.
Pómulos Altos: Rasgos Definitorios
Los pómulos altos se sitúan justo debajo de los ojos, aportando angulosidad y definición al rostro. Crean sombras naturales que resaltan la mirada y afinan la cara. Los maquilladores suelen recrear este efecto con técnicas de contouring, demostrando el poder del relieve facial. Los pómulos altos se asocian con una apariencia juvenil y esculpida, motivo por el cual son tan valorados en el mundo de la moda y el cine.
Pómulos Bajos: Rasgos Definitorios
Los pómulos bajos están más próximos a la nariz y la parte media del rostro. Suelen dar una impresión más redondeada y suave. Algunas personas los asocian con amabilidad y cercanía, en contraste con el aspecto más marcado de los pómulos altos. Aunque históricamente se han valorado menos, los pómulos bajos también son atractivos. Su forma suave y equilibrada armoniza con muchos tipos de rostro, lo que demuestra que la belleza no depende de una sola estructura facial.
Pómulos Altos vs Pómulos Bajos: Percepción Cultural
Las ideas culturales influyen mucho en cómo se valoran los pómulos. En los medios occidentales, los pómulos altos se asocian con elegancia y fuerza. Modelos y actores con rostros esculpidos dominan las portadas. En cambio, en otras culturas, los rostros más redondeados con pómulos bajos se consideran más juveniles y amables. Estas diferencias culturales demuestran que la belleza no es universal, sino relativa al contexto.

Mitos y Realidades sobre los Pómulos
Mito: Solo los pómulos altos son bellos.
Realidad: Ambos tipos pueden ser atractivos si hay equilibrio y armonía facial.
Mito: Los pómulos bajos envejecen antes.
Realidad: Los pómulos bajos aportan suavidad y juventud en muchos rostros.
Mito: La cirugía es la única forma de realzar los pómulos.
Realidad: Los tratamientos no quirúrgicos, como los rellenos, ofrecen resultados efectivos y naturales.
Tratamientos para Pómulos Altos y Bajos
Las opciones para realzar los pómulos varían según el objetivo. Los rellenos dérmicos son el método más común para aportar definición. Aplicados estratégicamente, imitan el efecto de los pómulos altos. La transferencia de grasa es una alternativa natural que utiliza el propio tejido corporal.
Para resultados permanentes, los implantes malares ofrecen estructura duradera. Por otro lado, quienes ya tienen pómulos altos pueden recurrir a tratamientos más sutiles, como rellenos ligeros o procedimientos reafirmantes para mantener la firmeza con el paso del tiempo.
Impacto Psicológico
La posición de los pómulos no solo influye en la apariencia, sino también en la autopercepción. Algunas personas con pómulos bajos sienten que su rostro es menos definido en fotografías, mientras que quienes tienen pómulos altos perciben su rostro más esculpido incluso sin maquillaje. Sin embargo, cualquier mejora estética busca aumentar la confianza, no cambiar la identidad. Recuperar el equilibrio facial ayuda a que los rasgos reflejen mejor la personalidad.
Conclusión
La comparación entre pómulos altos y bajos no trata de cuál es “mejor”. Ambos aportan rasgos únicos que definen el rostro. Los pómulos altos crean definición y angulosidad, mientras que los bajos aportan suavidad y calidez.
Los tratamientos permiten mejorar ambos tipos, buscando siempre equilibrio y armonía. En última instancia, la verdadera belleza reside en la confianza y en la proporción natural del rostro, no en la altura de los huesos.
Para más información o para solicitar una consulta, visita la página web de ACIBADEM Beauty Center.
Preguntas frecuentes
Los pómulos altos están más cerca de los ojos, mientras que los bajos se sitúan hacia la parte media del rostro.
No necesariamente. La belleza depende de la armonía y las proporciones del rostro.
Sí. Los rellenos o la transferencia de grasa ofrecen un realce natural y sin incisiones.
Suelen mantener la definición por más tiempo, aunque todos los rostros cambian con la edad.
En Turquía, los rellenos rondan los 300 € y los implantes comienzan en 3.000 €, mientras que en España superan los 8.000 €.